Salvación Eterna
Cuando uno oye término “Seguridad Eterna”, si es malentendido, puede encender un debate por aquellos que no lo comprenden. Yo, personalmente, prefiero usar el término “Salvación Eterna”, creo que es una expresión más Bíblica. Muchas personas están convencidas de que uno no puede estar seguro de que irá al cielo. Hay tres maneras básicas en que el hombre ve la salvación: 1) El hombre es salvo por obras, 2) El hombre es salve por gracia y mantenido por sus buenas obras, y 3) El hombre es salvo por gracia y mantenido salvo por gracia. Cuando el hombre entiende lo que hizo Cristo y la naturaleza de la salvación, él comprenderá que la tercera posición es la perspectiva Bíblica.
Seguridad Eterna
La Seguridad eterna es la confianza Bíblica de que cada creyente nacido de Nuevo tiene una perfecta, completa y eternal salvación en Jesucristo. Tan pronto como un pecador recibe a Cristo, él posee una salvación plena y sin fin. Tener a Cristo es tener una posición segura delante de Dios (I Juan 5 10-13). Aunque la Biblia no usa el término “seguridad” para describir la relación del creyente en Cristo, eso no deja duda de que el hijo de Dios está eternamente seguro en Jesús. La seguridad eternal se refiere a hipócritas o a aquellos que están apenas salpicados de las cosas de Dios. Aquellos que se apartan permanentemente nunca han sido nacidos de nuevo.
Cómo podemos estar seguros de que los Cristianos están seguros eternamente.
1. Por causa de los términos usados para describir la salvación.
“Vida eterna” (Juan 3:16; I Juan 5:11)
“Plena certeza” (Hebreos 6:11; Colosenses 2:2)
“Fortísimo consuelo” (Hebreos 6:18)
“Esperanza…segura y firme” (Hebreos 6:19)
2. Por quiénes somos.
(1) Perdonados (Romanos 4:7; I Juan 2:12)
(2) Justificados (Romanos 5:1, 9; Tito 3:7)
(3) Resucitados con Cristo (romanos 6:3-6; Colosenses 3:1, 2)
(4) Reconciliados (romanos 5:10)
(5) Aceptados en el amado (Efesios 1:6)
(6) Salvos (Efesios 2:8, 9; Tito 1:9)
(7) Ciudadanos del Cielo (Filipenses 3:20)
(8) Hijos de luz (I Tesalonicenses 5:5)
(9) No de este mundo (Juan 17:16)
(10) Elegidos (I Pedro 1:2)
(11) Nacidos de nuevo (I Pedro 1:2, 23)
(12) Nueva creación (II Corintios 5:17)
(13) Completos en Él (Colosenses 2:10)
(14) Santificados una vez por todas (Hebreos 10:10)
(15) Perfeccionados para siempre (Hebreos 10:14)
(16) Pasados de muerte a vida (I Juan 3:14)
(17) Santificados en Cristo (I Corintios 1:2)
(18) Luz en el Señor (Efesios 5:8)
(19) Un hijo de Dios para siempre (Romanos 8:15; Gálatas 4:4-7; I Juan 3:1)
(20) Hechos aptos para el cielo (Colosenses 1:12)
3. Por causa de donde estamos.
(1) En lugares celestiales con Cristo (Efesios 2:5-6)
(2) En la familia de Dios (Gálatas 3:26; I Juan 3:2)
(3) Trasladados al reino de su amado hijo (Colosenses 1:13)
(4) Traídos cerca (Efesios 2:13)
4. Por causa de lo que tenemos.
(1) Paz con Dios (Romanos 5:1)
(2) Vida eterna (Juan 3:16)
(3) El sello del Espíritu Santo (Efesios 1:12-14)
(4) Todas las bendiciones espirituales (Efesios 1:3)
(5) Acceso a Dios (Efesios 2:18)
(6) Un abogado para con el Padre (I Juan 2 1-2)
(7) Redención Eterna (Hebreos 9:12)
(8) Perdón de pecados (Efesios 1:7; Colosenses 1:14; 2:13)
(9) Misericordia (I Pedro 2:10)
(10) Gloria eterna (II Timoteo 2:10)
(11) Consolación eterna (II Timoteo 2:16)
(12) Un intercesor en el cielo (romanos 8:34)
5. Por causa de lo que es pasado.
(1) La ley del pecado y de la muerte (Romanos 8:2)
(2) Muerte e ira (Colosenses 3:3; Romanos 6:11; I Tesalonicenses 5:9)
(3) Condenación (Juan 5:24)
(4) Noche y oscuridad (I Tesalonicenses 5:5)
6. Por causa de las promesas de Dios.
(1) La gloria de Dios (Romanos 5:2). Esto habla de la gloria del reino de Cristo.
(2) Redención de cuerpo (Romanos 8:23-24; Filipenses 3:21)
(3) Nunca perecerán (Juan 10:27-28)
(4) Predestinados a ser conformados a la imagen de Cristo (Romanos 8:28-29)
(5) Aparecerán con Cristo en la gloria (Colosenses 3:3-4)
(6) No señalados para la ira sino para la salvación (I Tesalonicenses 5:9)
(7) Librados de la ira venidera (I Tesalonicenses 1:10)
(8) Herencia incorruptible (I Pedro 1:4)
(9) Aquél que comenzó la buena obra en ustedes, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo (Filipenses 1:6)
(10) Nunca morirán (Juan 11:26)
(11) Libertad gloriosa de los hijos de Dios (Romanos 8:21)
(12) Dios los confirmará hasta el final (I Corintios 1:8)
(13) Herencia eterna (Hebreos 9:15)
(14) Serán librados de la ira (Romanos 5:9)
(15) No pueden ser separados de amor de Dios (Romanos 8:31-39)
¿Cómo podemos saber que estas bendiciones no pueden ser perdidas?
1. Las bendiciones de la salvación no pueden ser perdidas por causa de la naturaleza de la salvación:
(1) La salvación es por sustitución (II Corintios 5:17; Gálatas 2:20; Hebreos 9:10; Romanos 3:24)
(2) La salvación es posicional (Efesios 1; Romanos 6:7; Colosenses 2:10; 3:1-4, 12)
(3) La salvación es una posesión presente (Romanos 5; I Pedro 2:24-25)
(4) La salvación es eterna (Juan 3:16, 36)
(5) La salvación no es por méritos humanos; es un don gratis de gracia que no puede ser mezclado con obras (Efesios 2:8-9; Tito 3:3-7; Romanos 3:19-28; 4:4-5;11:6)
2. Las bendiciones de la salvación no pueden ser perdidas por causa de los resultados de la salvación.
(1) Justificación (Romanos 5:1; 3:19-28)
(2) Paz con Dios (Romanos 5:1)
(3) Posesión segura de la gloria futura (Romanos 5:2; Colosenses 3:1-4)
(4) Salvación de la ira venidera (Romanos 5:9)
(5) Vida eterna (Juan 3:16)
(6) Sellados con el Espíritu Santo (Efesios 4:30)
(7) Resucitados con Cristo (Romanos 6)
(8) Pasados de oscuridad a luz (Colosenses 1:12-14)
(9) Bendecidos con todas las bendiciones espirituales en Cristo (Efesios 1)
3. Las bendiciones de la salvación no pueden ser perdidas por causa de la enseñanza de la elección.
La elección no elimina la responsabilidad humana (II Tesalonicenses 2:10-13; Hechos 13:46, 48), pero la elección si promete seguridad para el creyente (Romanos 8:28-29; Efesios 1; I Pedro 1:2-7)
4. Las bendiciones de la salvación no pueden ser perdidas porque la falta de buenas obras involucra la pérdida de recompensas y frutos, no la pérdida de la eterna relación de uno con Cristo.
(I Corintios 3:15; Tito 3:14; II Juan 8)
5. Las bendiciones de la salvación no pueden ser perdidas por causa de la persona y obra de Cristo.
(Colosenses 1:14; Efesios 1; Hebreos 9:10; I Pedro 1:18-23; 2:6, 24-25)
¿Significa la seguridad eterna que cualquiera que profese a Cristo es salvo, sin importar de que no de evidencia de una fe genuina?
1. No, la salvación demanda arrepentimiento (Lucas 13:3-5; Hechos 17:30-31). El arrepentimiento significa un cambio de mente que resulta en un cambio de vida (II Corintios 7:8-11). La persona que no ha cambiado su manera de pensar con respecto a Dios, el pecado, Cristo, la Biblia, etc., y que nunca ha evidenciado este cambio de pensamiento con una vida santa y transformada, nunca se ha arrepentido y nunca ha sido salva.
2. No, la salvación requiere el nuevo nacimiento, y el nuevo nacimiento siempre cambia la vida del hombre (II Corintios 5:17-21; Mateo 18:3-4; Juan 3:1-18; I Juan 3:7-10; III Juan ¡!).
3. No, la salvación es evidenciada por la perseverancia (Juan 10:27-28; Mateo 7:17; 6:9; Romanos 8:13-14; Colosenses 1:21-23; Hebreos 3:12-14; 10:38-39; I Juan 2:19; 3:3). De acuerdo con estas Escrituras, el que es verdaderamente nacido de nuevo perseverará en Él!
4. No, la fe que salva siempre produce obras (Romanos 4:18-21; Hebreos 11; Santiago 2:14-26). Si alguno dice tener fe en Cristo, pero su vida no refleja las obras de Cristo, éste no tiene la fe Bíblica. Una profesión sin fruto (de tener fruto) no puede reclamar las promesas de Dios de la seguridad eterna.
¿Causa la seguridad eterna que la gente viva sin cuidado?
La seguridad eterna no causa que la gente viva sin cuidado; lo opuesto es cierto. La Biblia enseña que la gracia de Dios motiva a los creyentes a servir a Dios con un corazón agradecido (Romanos 2:4; Efesios 3:14-19; tito 2:11-14). Entre más un creyente entienda el profundo amor que Dios le tiene en Cristo, más va a querer agradarlo a Él.
¿Quién tiene la seguridad eterna?
Es importante enfatizar aun más, que la doctrina de la seguridad eterna no promete ninguna salvación para aquel que profese a Cristo de palabras. En el siguiente estudio veremos que la Biblia conecta la seguridad eterna solo con el verdadero creyente, aquel que ha nacido de nuevo, y lo diferencia del que solo profesa de palabras. ¿Quién tiene la seguridad eterna?
(1) Aquellos que han nacido de nuevo (II Corintios 5:17; Efesios 2:10; Gálatas 6:15).
(2) Aquellos que siguen a Cristo (Juan 10:27-28).
(3) Aquellos que se purifican a sí mismos (I Juan 3:1-3).
(4) Aquellos que aman a la comunidad de Hermanos (I Juan 3:15).
(5) Aquellos que tienen una fe convencida e indivisible (Hebreos 4:10,11).
(6) Aquellos que están en la verdad y continúan en ella (I Juan 2:19-21; II Juan 1-2).
(7) Aquellos que continúan en la Palabra (Juan 8:31, 32).
(8) Aquellos que se mantienen pacientes y firmes en las tribulaciones (Hebreos 10:35-39)
(9) Aquellos que evidencian las “cosas que acompañan a la salvación” (Hebreos 6:9-12).
(10) Aquellos que mantienen su confianza en Cristo (Hebreos 3:14; Filipenses 1:21-23).
(11) Aquellos que son guiados por el Espíritu de Dios (Romanos 8:14-15).
(12) Aquellos que son santificados de un estilo de vida injusto (I Corintios 6:9-11).
(13) Aquellos que han demostrado su elección (I Tesalonicenses 1:4-10).
(14) Aquellos que han crucificado la carne con las afecciones y lujurias (Gálatas 5:19-24).
(15) Aquellos que están esperando el regreso de Cristo (Hebreos 9:28).
(16) Aquellos que tienen el renuevo del Espíritu Santo (tito 3:5-7).
(17) Aquellos que slen de la iniquidad (II Timoteo 2:19).
(18) Aquellos que dan fruto (Colosenses 1:7-8; Juan 15:2; Lucas 3:9).
¿Quiénes no tienen la seguridad eterna?
(1) Aquellos que profesan pero que no se arrepienten (Lucas 3:7-14).
(2) Aquellos que sólo tienen una afiliación intelectual (Juan 2:23-25).
(3) Aquellos que tienen una fe en sus fuerzas, solo creyendo lo que ellos quieren creer en lugar del testimonio de las Escrituras (Juan 6:60-66).
(4) Aquellos que tienen un celo religioso aparte del evangelio (Romanos 10:1-4).
Si el creyente desobediente no pierde su salvación, ¿Qué pasa con Él?
(1) El Cristiano pecador está fuera de comunión con el Señor (I Juan 1).
(2) El Cristiano pecador es ayudado por el Señor Jesucristo (I Juan 2:1-2).
(3) El Cristiano pecador es castigado por el Padre (Hebreos 12).
(4) El Cristiano pecador pierde oportunidades irremplazables de servicio y de dar fruto (Efesios 5:14-17; Mateo 9:36-38; I Tesalonicenses 5:4-10).
(5) El Cristiano pecador sufrirá pérdida en el tribunal de Cristo (II Corintios 5; I Corintios 3:11-15; I Timoteo 6:17-19; I Juan 2:28).